Las Águilas llegan a la jornada de este martes con un 7.4% de probabilidades de clasificarse al round robin y el Licey con un 90%. Es lo que dice la fórmula del Método de Montecarlo que utiliza Béisbol Data, un pronóstico al que los más optimistas aguiluchos como poco tratan de ridiculizar cuando ven el desempeño del equipo en los últimos siete juegos (5-2) y apuntan al choque de esta noche donde pueden disparar la autoestima… o volver a acerarse al precipicio.
Es hora de jugar los partidos pendientes a las pizarras de los otros, usar las calculadoras y calcular más movimiento en el standing que un Gran Maestro de ajedrez.
Amarillos (16-23) y azules (20-20) se citan esta noche en el Estadio Quisqueya a un partido que ni sepulta ni clasifica a uno u otro, pero que puede compartir la presión que ha llevado el conjunto cibaeño durante la mayor parte del torneo.
Tres juegos y medio tiene el equipo añil sobre su clásico rival, en el cuarto puesto, tras el triunfo épico del domingo en Santiago. Una victoria felina le daría holgura, quitaría presión tras caer tres veces al hilo, y mantendría en su control el pase al round robin en una fase regular que concluye dentro de 10 días (el viernes 22).
En cambio, un triunfo aguilucho no solo los acercaría a dos partidos y medio del «dinero», sino que dispararía la ilusión de remontada que tanto reitera Tony Peña a sus jugadores desde que asumió las riendas del «grupo de enanos» que dijo le entregaron.
No hay mañana para los santiagueros, el margen de error lo tienen reducido a casi cero cuando se le exige al 100%, en cada choque. El miércoles reciben a unos Toros en igual apuros, el jueves viajan a San Pedro a medirse a unas Estrellas que vienen de caer tres veces al hilo y reforzadas con Fernando Tatis Jr., y el viernes vienen al Quisqueya a un doble juego contra un Escogido que le ha ganado seis de siete desafíos.
Los equipos juegan el cierre de la fase regular a tres velocidades. Mientras en la cola Toros y Águilas luchan por sobrevivir, el Licey tiene el destino en sus manos y en la parte de arriba Escogido y Estrellas tratan de darle caza en la punta a unos Gigantes que pueden asegurar su clasificación el miércoles (si se combinan doble triunfo suyo y doble revés aguilucho).
Este martes, los Leones (ya sin José Ramírez y a la espera de Starling Marte) viajan a La Romana a buscar una victoria que no solo le mantenga en segundo, sino que lo deje a un empujón de su primera clasificación en cuatro torneos.
En el Corral lo esperan unos Toros (16-24) que de momento son la gran decepción del torneo. Un equipo hecho a base de talonarios, los bovinos arrancan la fecha en el sótano, a cuatro juegos del cuarto lugar.
En el Julián Javier, los potros reciben a las Estrellas con la posibilidad de convertirse en el primer equipo que se asegura jugar para .500 y apuntar los cañones el resto del calendario en procurar un primer lugar que le daría ventaja a la hora de escoger en el sorteo de reingreso.